Lo prometido es deuda. Me ha costado un tiempo sacarle el jugo, pero aquí tenéis mi review de Assassin’s Creed Unity
Polémico juego este…
Entre manos tenemos nada menos que el primer Assassin’s Creed desarrollado en exclusiva para la nueva generación de consola y PC. El motivo, según Ubisoft, es poder aprovechar el hardware sin las limitaciones que impone un desarrollo entre generaciones, como fue el de Assassin’s Creed 4. La importancia de este hecho es crucial, no sólo para la propia franquicia, sino para la propia nueva generación, que ve en este su primer gran juego multiplataforma. Porque sí, señores, un año después del lanzamiento de PS4 y One aún no había ninguno que no se hubiera diseñado con PS3 y Xbox 360 en el foco, con la excepción de alguna saga deportiva y poquito más. Increíble pero cierto…
El caso es que Ubisoft tenía esta vez mucho que demostrar. Y no sólo en el aspecto técnico. La saga lleva un tiempo estancándose, y aunque Black Flag era innovador gracias a su ambientación marítima sus mecánicas más novedosas no pueden utilizarse en el resto de juegos de la saga por motivos argumentales. Esta vez la expectación era máxima. Y desde Ubisoft lo saben, por lo que no han dejado de prometer muchos cambios en los meses previos, como una revisión completa del sistema de parkour, multijugador cooperativo integrado y otras bondades. ¿Justifica la calidad de esta entrega el hecho de tener el octavo juego principal en 7 años? ¿Cumple Assassin’s Creed Unity todo lo prometido? No. Aunque eso no significa que sea un mal juego.
Voy a comenzar por la pregunta que parece preocupar a todo el mundo. ¿Es Unity el prodigio técnico que aparentaba en los videos? Bueno, sí, y no. ¿Es un despropósito de bugs y un producto injugable? No, de ninguna manera. Pero vamos al plano técnico: Lo primero que llama la atención en Unity es la iluminación, especialmente cuando es de día. El día en París tiene momentos de auténtico fotorealismo, en el que todo acompaña: Sombras dinámicas nítidas, reflejos realistas en todo tipo de superficies (desde espejos y ventanas hasta charcos y suelos de mármol), clima cambiante, con momentos luminosos y otros más cubiertos, niebla, lluvia… una delicia, que por momentos supera a lo visto en cualquiera de los lanzamientos más punteros de la nueva generación en ese sentido, como puede ser inFamous Second Son. Es muy llamativo el tratamiento que se hace de ciertas superficies, como los mármoles o el agua, que salpica si pasas corriendo sobre un charco o por la orilla del río. También llamativo es el comportamiento del fuego. El juego está plagado de multitud de detalles técnicos que te llevan a pensar que después de todo compraste una consola nueva por algo.
La potencia de la nueva generación se nota en otros elementos, como en el gran número de personajes en pantalla en todo momento y la variedad de los mismos. Y es que nunca había visto una ciudad tan viva en juego alguno. Y no es sólo la cantidad y la variedad. Los habitantes de París viven sus vidas. Puedes encontrarlos manifestándose por la Revolución, cantando proclamas, luchando con soldados… pero también trabajando en su negocio, bebiendo en una taberna, jugando a las cartas, saludándose afablemente cuando se encuentran por la calle, besándose detrás de una esquina… Es increíble la cantidad de cosas que hacen los parisinos, y sólo cuando lleves unas cuantas horas jugando encontrarás alguna repetición no ya en los modelos en sí, sino en las tareas que realizan. Si queríais saber en qué se traduce la next-gen para un sandbox, aquí lo tenéis. Este París hubiera sido imposible en la generación anterior, sin duda.
Eso sí, en la París de 1789 no había niños... Una licencia de todos los Assassin's, supongo que para evitar que alguien se líe a espadazos con un infante y lo suba a youTube... En cualquier caso nada que reprochar. A la excelencia técnica hay que añadirle una recreación de la París del siglo 18 absolutamente magistral. No sólo están ahí los principales monumentos recreados con un nivel de detalle enfermizo. Son las propias calles y plazas las que llegan a sorprender.
Para empezar, los barrios son bastante diferentes entre sí. No tiene nada que ver un barrio de clase baja, con casas destartaladas en calles embarradas y sin farolas, con los monumentos y palacios en las calles perfectamente empedradas del centro. Esta vez además podemos entrar en muchos edificios. En muchísimos. Prácticamente en todas las manzanas hay ventanas o puertas abiertas por las que podemos pasar. Desde humildes casas de clase baja a fastuosos palacios, todo está a nuestro alcance. Y no es lo mismo un palacio que la casa de un artesano. Incluso en aquellas casas en las que no podemos entrar desaparece esa sensación de “caja negra” que hay en otros sandbox. Muchas ventanas tienen cristales y se ve a través de ellas, aunque sea una cortina cerrada. En ningún momento te da la sensación de que haya elementos explorables y otros no, como ocurre siempre en este tipo de juegos. A simple vista podrías entrar en cualquier edificio. Obviamente cuando miras en detalle ves que hay elementos que se repiten, con casas similares por dentro, por ejemplo, pero en general se crea una sensación de “estar allí” que no he vivido en ningún otro juego.
Unimos esto al increíble ambiente de las calles y sólo podemos decir que es la ciudad más viva y creíble jamás representada en un videojuego. Y sí, incluyo en esta afirmación a Los Santos. Incluso a Los Santos next-gen.
Es cierto, sin embargo, que no todo está al mismo nivel. Durante la noche no se alcanza el mismo nivel de realismo, con una iluminación mucho más parecida a lo que nos tenían acostumbrados nuestras anteriores consolas. La distancia de dibujado es enorme, pero a costa de un ligero popping que puntualmente puede ser llamativo. Los modelos de los personajes son variados y muy detallados, pero nos encontramos con situaciones en las que dos personajes hablan sin mirarse ni mover la boca… También tenemos clipping en ciertos momentos, con parte de un personaje atravesando el brazo de otro y cosas así. Lo que nos lleva al caballo de batalla que tiene ahora mismo Ubisoft encima de la mesa: Los bugs.
Porque sí, Unity tiene bugs. Todos los sandbox los tienen, en mayor o menor medida, pero Unity vuelve al nivel de Assassin’s Creed 3. Algunos de los más llamativos se han dado sólo en la versión de PC (las caras siniestras con ojos flotando en el vacío, como la de la imagen), pero en general todas las versiones tienen problemas. No es que el juego esté roto, como he leído por ahí, ni mucho menos. Pero si no lo parcheas te vas a encontrar con algunos bugs de esos que te sacan un poco del ambiente. Incluso después del parche permanecen más de los deseables. Un soldado que se choca con un peatón y se queda atrapado, otro que se queda a medio caer en mitad del cielo, un peatón que camina por la calle a dos metros sobre el suelo… Incluso me encontré con uno molesto (que ya ha sido solucionado), y que hacía que en determinadas circunstancias atravesáramos el suelo y cayésemos hacia “el centro de la tierra”. También se ha hablado mucho de los bajones de framerate, aunque para mí esto es lo de menos. Es un problema que al menos en PS4 se da muy esporádicamente y no afecta al juego en sí.
Una vez jugado parece claro que el juego ha salido del horno uno o dos meses antes de estar completamente cocinado. Esto se nota no sólo en los bugs, sino en algunos detalles de ambientación en los que te fijas después de jugar un tiempo. Por ejemplo, la cuidadísima ambientación revolucionaria está muy conseguida… pero no cambia. Me explico: Siempre hay cientos o miles de ciudadanos en la calle, cantando proclamas y pidiendo la cabeza de los aristócratas… en 1789, 1790 o en 1794. De día y de noche… Es curioso, porque Assassin’s Creed 2 no era lo mismo el día que la noche, ni era el mismo ambiente durante una revuelta que en tiempos más tranquilos. Aquí la ciudad es siempre un enorme hervidero revolucionario, y eso te saca un poco del ambiente. Digamos que el exceso de ambiente le acaba pasando factura a la ambientación, por raro que parezca. Y es una pena, porque hubiera tenido una recepción muy diferente por parte de crítica y público si no hubiera sido por estas cosas. De hecho se le ha criticado mucho que al final su resolución máxima en consola es de 900p en consolas. Yo sinceramente no le doy mucha importancia, pero entiendo que para quien juegue en televisores muy grandes puede ser un problema. Estoy seguro de que con uno o dos meses más de desarrollo el juego hubiera salido muy beneficiado, quizá hubiera llegado a los 1080p, todo el mundo hubiera alabado sus grandes logros técnicos, que los tiene, y se hubieran cuidado más algunos aspectos.
En el momento de escribir estas líneas Ubisoft ya había sacado un enorme parche (de más de 2 GB) que corrige si no todos al menos los más notables. Más de 300 según la compañía. Para cuando salió yo ya me había terminado la campaña principal, pero he podido probarlo en muchas otras misiones secundarias. Y tengo que decir que sí parecen haberse corregido muchos problemas y que el frame rate parece más estable que antes. En cualquier caso, no comparto lo que se lee por los foros que arden en medio mundo, diciendo que el juego es injugable. Yo me jugué la campaña principal antes de la salida del parche, y aunque me encontré con problemas me pareció que afectaban poco a la experiencia, no como se lee por ahí. A las imágenes me remito. Para que os hagáis una idea de lo que os vais a encontrar, aquí os dejo un video de una misión de mi propia partida. Ventajas del botón share de PS4. El video está editado para hacer los menos spoilers posibles.
Como veis, no es precisamente un juego con un rendimiento nefasto ni con gráficos simplones, y este video está hecho cuando sólo había salido un pequeño parche menor, mientras jugaba la campaña principal. Vamos, que Vida Extra, por ejemplo, dedicó un reportaje al mal que hace que salgan juegos rotos, que son injugables debido a los bugs, con Unity como ejemplo evidente. Y no es verdad. No me quiero meter con el reportero de Vida Extra, ni mucho menos, pues da su opinión y es tan válida como la mía, y normalmente me identifico con sus opiniones, pero me parece que los medios no son del todo objetivos con esta saga en lo que a bugs se refiere, sobre todo cuando juegos como Skyrim o GTA V también tienen su propia ración de bichos y nadie lo comenta. Lo que no quita para que Ubisoft necesite un tirón de orejas…
Normalmente no me extiendo tanto en lo técnico, pero creo que esta vez lo merecía. Y ahora a lo importante: Y el juego en sí, ¿qué? Que aquí venimos a jugar, oiga, no a ver quién la tiene más potente… Pues también tenemos claroscuros. Lo primero que tenemos que decir es que volvemos a la fórmula clásica. Esta vez no hay barcos ni nada parecido. La aventura de Arno es una vuelta a la fórmula clásica de Assassin’s Creed 2, aunque hay que decir que el resultado es menos exitoso que en su ilustre predecesor. Pero empecemos por el principio. Esta vez nuestro eslabón con la historia se llama Arno Dorian. Hijo de un Asesino, no tardará en seguir los pasos de su malogrado padre en el ambiente revolucionario del París de finales del siglo 18. A partir de ahí asistiremos a una buena historia en un increíble marco. Un buen argumento que sin embargo nos deja una cierta sensación de oportunidad desaprovechada. Conocemos a alguno de los personajes más importantes de la época, como a un joven Napoleón Bonaparte, y asistiremos a algunos de los momentos más importantes de la historia moderna, como la toma de la Bastilla o la decapitación del Rey Luis XVI. Y asistiremos a los movimientos en la sombra de asesinos y templarios para que el conflicto se resuelva en su interés. Sin embargo esta vez no tendremos tanto peso en los acontecimientos como en anteriores entregas. Hay una cierta sensación de que Arno sencillamente es espectador de lo que ocurre. Y es una pena, porque una localización como la Francia de la Revolución podía haber dado mucho más de sí. De hecho, una vez terminado el juego parece que la historia es la menos trascendente de todas las que hemos vivido en las entregas principales de la saga. No parece ser una historia decisiva en el devenir de la guerra entre Templarios y Asesinos, sino tan sólo una más.
Pero esto no debería impedirnos disfrutar de una buena historia. Parte de la culpa de que disfrutemos la tiene nuestro protagonista, Arno. Sigue sin estar a la altura de nuestro querido Ezio Auditore, pero es que es muy difícil llegar ahí. Al menos Arno es un asesino de pura cepa, sin remordimientos ni contemplaciones, pero con un sentido moral bien definido. Piensa que lo que hace es lo correcto… la mayoría del tiempo. Además de Arno hay otro personaje con mucha importancia: Elise.
Arno y Elise llevan una relación bastante poco común. No voy a contar mucho más… bueno, sí, os diré que ella es una templaria. Al menos en este juego los asesinos no son tan buenos y los templarios no son tan malos. Los matices y las motivaciones de los personajes le dan profundidad al argumento y nos permite disfrutar de las cinemáticas. No todo es blanco o negro, y eso siempre es bienvenido. La historia principal se desarrolla a lo largo de 12 capítulos, y entre sus misiones destaca el nuevo enfoque que se le da a las de asesinato. Antes de empezar Arno se concentra y busca puntos débiles, posibles oportunidades… Le da un toque estratégico interesante.
Tengo que decir que no me extrañaría que salieran más juegos con el mismo protagonista. Seguir la historia de Napoleón y sus campañas en Austria, Rusia, Italia o España me parece una oportunidad de oro, y además explicaría por qué se ha desaprovechado en parte la oportunidad.
Aparte de la historia principal, tenemos decenas y decenas de misiones secundarias. Las hay de todo tipo. Las más numerosas son las llamadas Historias de París, que nos ayudarán a empaparnos aún más en la ambientación, a conocer a algún personaje interesante y a ganar un dinero extra. También tenemos los Enigmas de Nostradamus, que nos tendrán dando vueltas por París buscando glifos con pistas muy vagas, o las investigaciones de asesinato, en las que tendremos que descubrir a un asesino investigando al más puro estilo detectivesco. A veces los asesinos del presente nos sacarán de la simulación para evitar que nos rastreen, y nos introducirán en otra simulación parcial en las llamadas distorsiones. Estas simulaciones son de otras épocas de París, como la Segunda Guerra Mundial, y nos darán momentos gloriosos como escalar la Torre Eiffel mientras esquivamos el fuego de los cazas alemanes. De lo mejor del juego.
Y todo esto sin contar con coleccionables de todo tipo, cofres, misiones de los clubes sociales… no nos aburriremos en Paris. De hecho, cuando vaya a la ciudad por fin en la vida real creo la encontraré aburrida… al fin y al cabo ¡tendré poco que hacer!
Por si fuera poco, tenemos las misiones multijugador cooperativas, que jugaremos online hasta cuatro jugadores y se desarrollan fuera de la historia principal. Son interesantes, y algunas resultan bastante divertidas. He visto muchas quejas porque al parecer no funcionan bien, pero a mí no me ha pasado, más allá de que puedes tardar un poco de más en encontrar jugadores. Mi experiencia online ha sido correcta. Eso sí, tengo la consola conectada por cable a un router de fibra de 100 MB/s, así que no sé cómo irá si no tienes tanto ancho de banda disponible. Me parece un buen añadido a la serie, que espero que se repita.
En definitiva tenemos juego para muchas horas, aunque hay que reconocer que algunas de las misiones abusan de la fórmula “ve allí y elimina al tipo”. Claro, que hablamos de un juego con una ingente cantidad de misiones, así que es entendible que no todas estén al mismo nivel. Pasa lo mismo en todos los grandes sandbox, y este es muy grande.
¿Y las misiones del presente? Bueno, es sencillo: No hay. Una parte muy pequeña de la historia se desarrolla en el presente, pero sólo aparece en forma de cinemáticas, y además se cuenta de forma atropellada y no siempre creíble. Ay… ¿Dónde estás, Desmond?
Quizá la mayor diferencia con los juegos de Ezio es que eran más variado en situaciones. Eso se podía conseguir sólo con cambiar de ciudad, lo que ya cambiaba de forma drástica el escenario. Incluso La Hermandad tenía misiones fuera de Roma. También tenían misiones conduciendo un carro, volando en un aparato de Da Vinci, hundiendo barcos en el puerto… esa variedad no se da en Unity, y se echa de menos. ¿Son malas las misiones? No, para nada. En determinados momentos les falta algo de variedad, pero en general mantienen un buen nivel y son divertidas.
En cuanto a cómo se juega, bugs aparte, sí es cierto que Ubisoft le ha dado un buen repaso a algunas mecánicas, aunque no a todas para mejor. En un intento por mejorar el sistema de parkour, ahora podemos controlar si queremos escalar o descender. Y es cierto que el nuevo sistema funciona bien, pero lo que gana por un lado lo pierde por otro. Arno es algo más torpe que cualquiera de sus antecesores, y tiene más tendencia a quedarse parado en un saliente porque no quiere saltar al siguiente o a tardar más de la cuenta en bajar de un escalón. No es terrible, ni mucho menos, pero quizá el parkour también se hubiera podido pulir con un par de meses más de desarrollo… Sobre todo porque (y esto sí es un acierto) el nivel de dificultad de los combates ha aumentado notablemente. Ahora sí que pueden atacarte dos y tres soldados a la vez. Se cubren, atacan con fiereza… pueden matarte de un golpe bien dado, y las armas de fuego hacen muchísimo daño. Vamos, que han ido a clases de defensa personal, lo que siempre se agradece. Sigue sin ser un sistema de combate perfecto, pero ha mejorado notablemente.
Los combates son mucho más satisfactorios, y además son mucho más sangrientos, con salpicaduras de sangre en ropa, paredes... Un detalle que aumenta el realismo y la contundencia de los combates.
Todavía falta que los soldados no sean tan tontorrones en ciertas situaciones (oh, un compañero muerto… ¿quién ha sido? No veo a nadie… bueno, sigo con mi ronda como si no hubiera pasado nada).
Arno podrá desequilibrar las cosas mejorando sus cualidades. Para ello ganará puntos de experiencia (de sincronización) superando misiones. También podemos comprar nuevas armas y equipo, hasta convertirnos en la máquina de matar definitiva. Esto le da un toque rolero que funciona muy bien y que te pica bastante. Una buena idea. Terminarás el juego siendo una picadora de carne con ojos… Y el sistema de progresión es 100% libre. Tú eliges en qué ir invirtiendo la experiencia.
Y aquí hay otra de esas polémicas que hacen que los foros de medio mundo quieran hacerse con antorchas y marchar contra las oficinas de Ubisoft, cual toma de La Bastilla actualizada: Los micropagos. Podemos comprar “créditos de Helix” con dinero real, y así acceder a las armas y equipo antes. A mí sinceramente no me han molestado, porque los ignoras y ya está. Si tienes mucha prisa por acabar el juego puedes gastar dinero (más dinero) y avanzar más deprisa. O puedes desbloquearlo todo jugando, que es bastante más divertido. La verdad, no entiendo demasiado la polémica… todo se puede conseguir jugando de forma natural y divertida. No necesitas gastar dinero adicional en absoluto.
Para ir terminando, tenemos un apartado sonoro más que correcto. El doblaje es muy bueno. Y aunque han puesto a Cristian Gálvez a parir por su doblaje de Napoleón, no está tan mal, ni mucho menos.
Un último comentario para la Companion App que ha lanzado Ubisoft de forma gratuita. Muestra el mapa de París en tu móvil o Tablet, y permite desbloquear recompensas en el juego mediante minijuegos. Pero se come la batería a un ritmo sorprendente, se desconecta del juego continuamente y no funciona bien. Me quedé sin asesinos de pronto para las misiones que propone, no sé ni cómo, y no ha habido forma humana de conseguir más. Al parecer se lanzó una actualización, pero esa actualización no sirve para mi modelo de móvil… Un desastre, la verdad. Y es una pena porque se necesita para conseguir acceso a algunos de los cofres. Je suis désolé… Al menos es gratuita, y he leído que se supone que la arreglarán en algún momento.
Conclusiones:
Assassin’s Creed Unity es un juego de contrastes. Un apartado técnico que podría describirse como increíble que ha quedado en entredicho debido a los bugs y a una optimización a medias que deja el juego en 900p. Un sistema de control mejorado pero que no termina de funcionar tan bien como podría debido a la falta de optimización. Una IA mejorada en el combate pero tontísima en otros aspectos. Una buena historia que sin embargo tenía más potencial. Un juego con cientos de cosas que hacer en las que algunas son de relleno.
Pero con todo es un muy buen juego, un gran juego incluso, y una buena entrada en la nueva generación de una de mis sagas favoritas. Un auténtico juego next gen, una ciudad increíble que recorrer a placer, un sistema de progreso acertado y adictivo y mil cosas que hacer. Si os gusta Assassin’s Creed lo vais a disfrutar. Yo lo terminé hace unos días y todavía sigo haciendo misiones secundarias. Si la saga no os convence en sus últimas entregas, bueno, que sepáis que es más de lo mismo.
Lo Mejor:
- Con bugs, algo de popping, bajadas de frames y 900p, pero aun así una salvajada visual imposible en hardware más antiguo: Iluminación, reflejos, texturas, distancia de dibujado, número de personajes en pantalla… una PS3 se derrite sólo con estar cerca de la pantalla.
- La recreación de París es increíble. El nivel de detalle es absurdo. El número de personajes que lo habitan, su variedad, la gran cantidad de edificios explorables… Lo mejor que he visto nunca.
- La ambientación “revolucionaria”
- La gran mejora en el combate
- El toque rolero
- Algunas misiones secundarias son muy originales (asesinatos, enigmas, distorsiones…)
- Las opciones para afrontar un asesinato
- El multijugador cooperativo integrado: Así sí.
- Arno es un tío majo
Lo Peor:
- Bugs molestos y falta de optimización (solucionado en parte con parches)
- ¿El presente?
- La historia podría aprovechar mejor el marco histórico.
- Algunas misiones poco novedosas y algo repetitivas.
- El parkour podía estar más depurado.
- Cierta sensación de que se está estirando el chicle… la historia ya no es trascendente como cuando estaba Desmond.
- No tener con quién jugar el cooperativo
- La actitud de Ubisoft para con este y otros juegos, como Watch Dogs… se están labrando una fama terrible cuando en el fondo es una de las pocas compañías que apuesta por nuevas IPs con cierta frecuencia.
Nota: 8.5
Lo curioso es que muchos de los problemas que menciono se arreglan mediante parches. Ya se han arreglado muchos de ellos.
Siempre nos quedará París.
PD: Ubisoft ha pedido disculpas públicas por, básicamente, lanzar el juego sin acabar. Ya ha lanzado un enorme parche que soluciona muchos de los errores, aunque no todos, y regalará a todos los compradores el DLC Reyes Muertos, que iba a ser de pago. También regalará un juego a los que compraron el pase de temporada, de una lista con muchos AAA recientes. Está bien, es bueno que reaccionen, trabajen en los errores y compensen a los usuarios. Pero estaría aún mejor que cambiaran su política de lanzamientos y le dieran a los juegos el tiempo que necesitan.
Ay Ubisoft… dale medio añito más de desarrollo a los juegos si lo necesitan, por favor. No necesitamos un AC cada año… y este año salen dos.
Por cierto, de Assassin’s Creed - Rogue también hablaré espero que pronto. Pero antes me espera Lara Croft en PSX.
PD: Casi todas las fotos y videos provienen de mi propia partida… el botón de share de PS4 es el mejor amigo del analista!!
Polémico juego este…
Entre manos tenemos nada menos que el primer Assassin’s Creed desarrollado en exclusiva para la nueva generación de consola y PC. El motivo, según Ubisoft, es poder aprovechar el hardware sin las limitaciones que impone un desarrollo entre generaciones, como fue el de Assassin’s Creed 4. La importancia de este hecho es crucial, no sólo para la propia franquicia, sino para la propia nueva generación, que ve en este su primer gran juego multiplataforma. Porque sí, señores, un año después del lanzamiento de PS4 y One aún no había ninguno que no se hubiera diseñado con PS3 y Xbox 360 en el foco, con la excepción de alguna saga deportiva y poquito más. Increíble pero cierto…
El caso es que Ubisoft tenía esta vez mucho que demostrar. Y no sólo en el aspecto técnico. La saga lleva un tiempo estancándose, y aunque Black Flag era innovador gracias a su ambientación marítima sus mecánicas más novedosas no pueden utilizarse en el resto de juegos de la saga por motivos argumentales. Esta vez la expectación era máxima. Y desde Ubisoft lo saben, por lo que no han dejado de prometer muchos cambios en los meses previos, como una revisión completa del sistema de parkour, multijugador cooperativo integrado y otras bondades. ¿Justifica la calidad de esta entrega el hecho de tener el octavo juego principal en 7 años? ¿Cumple Assassin’s Creed Unity todo lo prometido? No. Aunque eso no significa que sea un mal juego.
Voy a comenzar por la pregunta que parece preocupar a todo el mundo. ¿Es Unity el prodigio técnico que aparentaba en los videos? Bueno, sí, y no. ¿Es un despropósito de bugs y un producto injugable? No, de ninguna manera. Pero vamos al plano técnico: Lo primero que llama la atención en Unity es la iluminación, especialmente cuando es de día. El día en París tiene momentos de auténtico fotorealismo, en el que todo acompaña: Sombras dinámicas nítidas, reflejos realistas en todo tipo de superficies (desde espejos y ventanas hasta charcos y suelos de mármol), clima cambiante, con momentos luminosos y otros más cubiertos, niebla, lluvia… una delicia, que por momentos supera a lo visto en cualquiera de los lanzamientos más punteros de la nueva generación en ese sentido, como puede ser inFamous Second Son. Es muy llamativo el tratamiento que se hace de ciertas superficies, como los mármoles o el agua, que salpica si pasas corriendo sobre un charco o por la orilla del río. También llamativo es el comportamiento del fuego. El juego está plagado de multitud de detalles técnicos que te llevan a pensar que después de todo compraste una consola nueva por algo.
La potencia de la nueva generación se nota en otros elementos, como en el gran número de personajes en pantalla en todo momento y la variedad de los mismos. Y es que nunca había visto una ciudad tan viva en juego alguno. Y no es sólo la cantidad y la variedad. Los habitantes de París viven sus vidas. Puedes encontrarlos manifestándose por la Revolución, cantando proclamas, luchando con soldados… pero también trabajando en su negocio, bebiendo en una taberna, jugando a las cartas, saludándose afablemente cuando se encuentran por la calle, besándose detrás de una esquina… Es increíble la cantidad de cosas que hacen los parisinos, y sólo cuando lleves unas cuantas horas jugando encontrarás alguna repetición no ya en los modelos en sí, sino en las tareas que realizan. Si queríais saber en qué se traduce la next-gen para un sandbox, aquí lo tenéis. Este París hubiera sido imposible en la generación anterior, sin duda.
Eso sí, en la París de 1789 no había niños... Una licencia de todos los Assassin's, supongo que para evitar que alguien se líe a espadazos con un infante y lo suba a youTube... En cualquier caso nada que reprochar. A la excelencia técnica hay que añadirle una recreación de la París del siglo 18 absolutamente magistral. No sólo están ahí los principales monumentos recreados con un nivel de detalle enfermizo. Son las propias calles y plazas las que llegan a sorprender.
Para empezar, los barrios son bastante diferentes entre sí. No tiene nada que ver un barrio de clase baja, con casas destartaladas en calles embarradas y sin farolas, con los monumentos y palacios en las calles perfectamente empedradas del centro. Esta vez además podemos entrar en muchos edificios. En muchísimos. Prácticamente en todas las manzanas hay ventanas o puertas abiertas por las que podemos pasar. Desde humildes casas de clase baja a fastuosos palacios, todo está a nuestro alcance. Y no es lo mismo un palacio que la casa de un artesano. Incluso en aquellas casas en las que no podemos entrar desaparece esa sensación de “caja negra” que hay en otros sandbox. Muchas ventanas tienen cristales y se ve a través de ellas, aunque sea una cortina cerrada. En ningún momento te da la sensación de que haya elementos explorables y otros no, como ocurre siempre en este tipo de juegos. A simple vista podrías entrar en cualquier edificio. Obviamente cuando miras en detalle ves que hay elementos que se repiten, con casas similares por dentro, por ejemplo, pero en general se crea una sensación de “estar allí” que no he vivido en ningún otro juego.
Unimos esto al increíble ambiente de las calles y sólo podemos decir que es la ciudad más viva y creíble jamás representada en un videojuego. Y sí, incluyo en esta afirmación a Los Santos. Incluso a Los Santos next-gen.
Es cierto, sin embargo, que no todo está al mismo nivel. Durante la noche no se alcanza el mismo nivel de realismo, con una iluminación mucho más parecida a lo que nos tenían acostumbrados nuestras anteriores consolas. La distancia de dibujado es enorme, pero a costa de un ligero popping que puntualmente puede ser llamativo. Los modelos de los personajes son variados y muy detallados, pero nos encontramos con situaciones en las que dos personajes hablan sin mirarse ni mover la boca… También tenemos clipping en ciertos momentos, con parte de un personaje atravesando el brazo de otro y cosas así. Lo que nos lleva al caballo de batalla que tiene ahora mismo Ubisoft encima de la mesa: Los bugs.
Porque sí, Unity tiene bugs. Todos los sandbox los tienen, en mayor o menor medida, pero Unity vuelve al nivel de Assassin’s Creed 3. Algunos de los más llamativos se han dado sólo en la versión de PC (las caras siniestras con ojos flotando en el vacío, como la de la imagen), pero en general todas las versiones tienen problemas. No es que el juego esté roto, como he leído por ahí, ni mucho menos. Pero si no lo parcheas te vas a encontrar con algunos bugs de esos que te sacan un poco del ambiente. Incluso después del parche permanecen más de los deseables. Un soldado que se choca con un peatón y se queda atrapado, otro que se queda a medio caer en mitad del cielo, un peatón que camina por la calle a dos metros sobre el suelo… Incluso me encontré con uno molesto (que ya ha sido solucionado), y que hacía que en determinadas circunstancias atravesáramos el suelo y cayésemos hacia “el centro de la tierra”. También se ha hablado mucho de los bajones de framerate, aunque para mí esto es lo de menos. Es un problema que al menos en PS4 se da muy esporádicamente y no afecta al juego en sí.
Una vez jugado parece claro que el juego ha salido del horno uno o dos meses antes de estar completamente cocinado. Esto se nota no sólo en los bugs, sino en algunos detalles de ambientación en los que te fijas después de jugar un tiempo. Por ejemplo, la cuidadísima ambientación revolucionaria está muy conseguida… pero no cambia. Me explico: Siempre hay cientos o miles de ciudadanos en la calle, cantando proclamas y pidiendo la cabeza de los aristócratas… en 1789, 1790 o en 1794. De día y de noche… Es curioso, porque Assassin’s Creed 2 no era lo mismo el día que la noche, ni era el mismo ambiente durante una revuelta que en tiempos más tranquilos. Aquí la ciudad es siempre un enorme hervidero revolucionario, y eso te saca un poco del ambiente. Digamos que el exceso de ambiente le acaba pasando factura a la ambientación, por raro que parezca. Y es una pena, porque hubiera tenido una recepción muy diferente por parte de crítica y público si no hubiera sido por estas cosas. De hecho se le ha criticado mucho que al final su resolución máxima en consola es de 900p en consolas. Yo sinceramente no le doy mucha importancia, pero entiendo que para quien juegue en televisores muy grandes puede ser un problema. Estoy seguro de que con uno o dos meses más de desarrollo el juego hubiera salido muy beneficiado, quizá hubiera llegado a los 1080p, todo el mundo hubiera alabado sus grandes logros técnicos, que los tiene, y se hubieran cuidado más algunos aspectos.
En el momento de escribir estas líneas Ubisoft ya había sacado un enorme parche (de más de 2 GB) que corrige si no todos al menos los más notables. Más de 300 según la compañía. Para cuando salió yo ya me había terminado la campaña principal, pero he podido probarlo en muchas otras misiones secundarias. Y tengo que decir que sí parecen haberse corregido muchos problemas y que el frame rate parece más estable que antes. En cualquier caso, no comparto lo que se lee por los foros que arden en medio mundo, diciendo que el juego es injugable. Yo me jugué la campaña principal antes de la salida del parche, y aunque me encontré con problemas me pareció que afectaban poco a la experiencia, no como se lee por ahí. A las imágenes me remito. Para que os hagáis una idea de lo que os vais a encontrar, aquí os dejo un video de una misión de mi propia partida. Ventajas del botón share de PS4. El video está editado para hacer los menos spoilers posibles.
Como veis, no es precisamente un juego con un rendimiento nefasto ni con gráficos simplones, y este video está hecho cuando sólo había salido un pequeño parche menor, mientras jugaba la campaña principal. Vamos, que Vida Extra, por ejemplo, dedicó un reportaje al mal que hace que salgan juegos rotos, que son injugables debido a los bugs, con Unity como ejemplo evidente. Y no es verdad. No me quiero meter con el reportero de Vida Extra, ni mucho menos, pues da su opinión y es tan válida como la mía, y normalmente me identifico con sus opiniones, pero me parece que los medios no son del todo objetivos con esta saga en lo que a bugs se refiere, sobre todo cuando juegos como Skyrim o GTA V también tienen su propia ración de bichos y nadie lo comenta. Lo que no quita para que Ubisoft necesite un tirón de orejas…
Normalmente no me extiendo tanto en lo técnico, pero creo que esta vez lo merecía. Y ahora a lo importante: Y el juego en sí, ¿qué? Que aquí venimos a jugar, oiga, no a ver quién la tiene más potente… Pues también tenemos claroscuros. Lo primero que tenemos que decir es que volvemos a la fórmula clásica. Esta vez no hay barcos ni nada parecido. La aventura de Arno es una vuelta a la fórmula clásica de Assassin’s Creed 2, aunque hay que decir que el resultado es menos exitoso que en su ilustre predecesor. Pero empecemos por el principio. Esta vez nuestro eslabón con la historia se llama Arno Dorian. Hijo de un Asesino, no tardará en seguir los pasos de su malogrado padre en el ambiente revolucionario del París de finales del siglo 18. A partir de ahí asistiremos a una buena historia en un increíble marco. Un buen argumento que sin embargo nos deja una cierta sensación de oportunidad desaprovechada. Conocemos a alguno de los personajes más importantes de la época, como a un joven Napoleón Bonaparte, y asistiremos a algunos de los momentos más importantes de la historia moderna, como la toma de la Bastilla o la decapitación del Rey Luis XVI. Y asistiremos a los movimientos en la sombra de asesinos y templarios para que el conflicto se resuelva en su interés. Sin embargo esta vez no tendremos tanto peso en los acontecimientos como en anteriores entregas. Hay una cierta sensación de que Arno sencillamente es espectador de lo que ocurre. Y es una pena, porque una localización como la Francia de la Revolución podía haber dado mucho más de sí. De hecho, una vez terminado el juego parece que la historia es la menos trascendente de todas las que hemos vivido en las entregas principales de la saga. No parece ser una historia decisiva en el devenir de la guerra entre Templarios y Asesinos, sino tan sólo una más.
Pero esto no debería impedirnos disfrutar de una buena historia. Parte de la culpa de que disfrutemos la tiene nuestro protagonista, Arno. Sigue sin estar a la altura de nuestro querido Ezio Auditore, pero es que es muy difícil llegar ahí. Al menos Arno es un asesino de pura cepa, sin remordimientos ni contemplaciones, pero con un sentido moral bien definido. Piensa que lo que hace es lo correcto… la mayoría del tiempo. Además de Arno hay otro personaje con mucha importancia: Elise.
Arno y Elise llevan una relación bastante poco común. No voy a contar mucho más… bueno, sí, os diré que ella es una templaria. Al menos en este juego los asesinos no son tan buenos y los templarios no son tan malos. Los matices y las motivaciones de los personajes le dan profundidad al argumento y nos permite disfrutar de las cinemáticas. No todo es blanco o negro, y eso siempre es bienvenido. La historia principal se desarrolla a lo largo de 12 capítulos, y entre sus misiones destaca el nuevo enfoque que se le da a las de asesinato. Antes de empezar Arno se concentra y busca puntos débiles, posibles oportunidades… Le da un toque estratégico interesante.
Tengo que decir que no me extrañaría que salieran más juegos con el mismo protagonista. Seguir la historia de Napoleón y sus campañas en Austria, Rusia, Italia o España me parece una oportunidad de oro, y además explicaría por qué se ha desaprovechado en parte la oportunidad.
Aparte de la historia principal, tenemos decenas y decenas de misiones secundarias. Las hay de todo tipo. Las más numerosas son las llamadas Historias de París, que nos ayudarán a empaparnos aún más en la ambientación, a conocer a algún personaje interesante y a ganar un dinero extra. También tenemos los Enigmas de Nostradamus, que nos tendrán dando vueltas por París buscando glifos con pistas muy vagas, o las investigaciones de asesinato, en las que tendremos que descubrir a un asesino investigando al más puro estilo detectivesco. A veces los asesinos del presente nos sacarán de la simulación para evitar que nos rastreen, y nos introducirán en otra simulación parcial en las llamadas distorsiones. Estas simulaciones son de otras épocas de París, como la Segunda Guerra Mundial, y nos darán momentos gloriosos como escalar la Torre Eiffel mientras esquivamos el fuego de los cazas alemanes. De lo mejor del juego.
Y todo esto sin contar con coleccionables de todo tipo, cofres, misiones de los clubes sociales… no nos aburriremos en Paris. De hecho, cuando vaya a la ciudad por fin en la vida real creo la encontraré aburrida… al fin y al cabo ¡tendré poco que hacer!
Por si fuera poco, tenemos las misiones multijugador cooperativas, que jugaremos online hasta cuatro jugadores y se desarrollan fuera de la historia principal. Son interesantes, y algunas resultan bastante divertidas. He visto muchas quejas porque al parecer no funcionan bien, pero a mí no me ha pasado, más allá de que puedes tardar un poco de más en encontrar jugadores. Mi experiencia online ha sido correcta. Eso sí, tengo la consola conectada por cable a un router de fibra de 100 MB/s, así que no sé cómo irá si no tienes tanto ancho de banda disponible. Me parece un buen añadido a la serie, que espero que se repita.
En definitiva tenemos juego para muchas horas, aunque hay que reconocer que algunas de las misiones abusan de la fórmula “ve allí y elimina al tipo”. Claro, que hablamos de un juego con una ingente cantidad de misiones, así que es entendible que no todas estén al mismo nivel. Pasa lo mismo en todos los grandes sandbox, y este es muy grande.
¿Y las misiones del presente? Bueno, es sencillo: No hay. Una parte muy pequeña de la historia se desarrolla en el presente, pero sólo aparece en forma de cinemáticas, y además se cuenta de forma atropellada y no siempre creíble. Ay… ¿Dónde estás, Desmond?
Quizá la mayor diferencia con los juegos de Ezio es que eran más variado en situaciones. Eso se podía conseguir sólo con cambiar de ciudad, lo que ya cambiaba de forma drástica el escenario. Incluso La Hermandad tenía misiones fuera de Roma. También tenían misiones conduciendo un carro, volando en un aparato de Da Vinci, hundiendo barcos en el puerto… esa variedad no se da en Unity, y se echa de menos. ¿Son malas las misiones? No, para nada. En determinados momentos les falta algo de variedad, pero en general mantienen un buen nivel y son divertidas.
En cuanto a cómo se juega, bugs aparte, sí es cierto que Ubisoft le ha dado un buen repaso a algunas mecánicas, aunque no a todas para mejor. En un intento por mejorar el sistema de parkour, ahora podemos controlar si queremos escalar o descender. Y es cierto que el nuevo sistema funciona bien, pero lo que gana por un lado lo pierde por otro. Arno es algo más torpe que cualquiera de sus antecesores, y tiene más tendencia a quedarse parado en un saliente porque no quiere saltar al siguiente o a tardar más de la cuenta en bajar de un escalón. No es terrible, ni mucho menos, pero quizá el parkour también se hubiera podido pulir con un par de meses más de desarrollo… Sobre todo porque (y esto sí es un acierto) el nivel de dificultad de los combates ha aumentado notablemente. Ahora sí que pueden atacarte dos y tres soldados a la vez. Se cubren, atacan con fiereza… pueden matarte de un golpe bien dado, y las armas de fuego hacen muchísimo daño. Vamos, que han ido a clases de defensa personal, lo que siempre se agradece. Sigue sin ser un sistema de combate perfecto, pero ha mejorado notablemente.
Los combates son mucho más satisfactorios, y además son mucho más sangrientos, con salpicaduras de sangre en ropa, paredes... Un detalle que aumenta el realismo y la contundencia de los combates.
Todavía falta que los soldados no sean tan tontorrones en ciertas situaciones (oh, un compañero muerto… ¿quién ha sido? No veo a nadie… bueno, sigo con mi ronda como si no hubiera pasado nada).
Arno podrá desequilibrar las cosas mejorando sus cualidades. Para ello ganará puntos de experiencia (de sincronización) superando misiones. También podemos comprar nuevas armas y equipo, hasta convertirnos en la máquina de matar definitiva. Esto le da un toque rolero que funciona muy bien y que te pica bastante. Una buena idea. Terminarás el juego siendo una picadora de carne con ojos… Y el sistema de progresión es 100% libre. Tú eliges en qué ir invirtiendo la experiencia.
Y aquí hay otra de esas polémicas que hacen que los foros de medio mundo quieran hacerse con antorchas y marchar contra las oficinas de Ubisoft, cual toma de La Bastilla actualizada: Los micropagos. Podemos comprar “créditos de Helix” con dinero real, y así acceder a las armas y equipo antes. A mí sinceramente no me han molestado, porque los ignoras y ya está. Si tienes mucha prisa por acabar el juego puedes gastar dinero (más dinero) y avanzar más deprisa. O puedes desbloquearlo todo jugando, que es bastante más divertido. La verdad, no entiendo demasiado la polémica… todo se puede conseguir jugando de forma natural y divertida. No necesitas gastar dinero adicional en absoluto.
Para ir terminando, tenemos un apartado sonoro más que correcto. El doblaje es muy bueno. Y aunque han puesto a Cristian Gálvez a parir por su doblaje de Napoleón, no está tan mal, ni mucho menos.
Un último comentario para la Companion App que ha lanzado Ubisoft de forma gratuita. Muestra el mapa de París en tu móvil o Tablet, y permite desbloquear recompensas en el juego mediante minijuegos. Pero se come la batería a un ritmo sorprendente, se desconecta del juego continuamente y no funciona bien. Me quedé sin asesinos de pronto para las misiones que propone, no sé ni cómo, y no ha habido forma humana de conseguir más. Al parecer se lanzó una actualización, pero esa actualización no sirve para mi modelo de móvil… Un desastre, la verdad. Y es una pena porque se necesita para conseguir acceso a algunos de los cofres. Je suis désolé… Al menos es gratuita, y he leído que se supone que la arreglarán en algún momento.
Conclusiones:
Assassin’s Creed Unity es un juego de contrastes. Un apartado técnico que podría describirse como increíble que ha quedado en entredicho debido a los bugs y a una optimización a medias que deja el juego en 900p. Un sistema de control mejorado pero que no termina de funcionar tan bien como podría debido a la falta de optimización. Una IA mejorada en el combate pero tontísima en otros aspectos. Una buena historia que sin embargo tenía más potencial. Un juego con cientos de cosas que hacer en las que algunas son de relleno.
Pero con todo es un muy buen juego, un gran juego incluso, y una buena entrada en la nueva generación de una de mis sagas favoritas. Un auténtico juego next gen, una ciudad increíble que recorrer a placer, un sistema de progreso acertado y adictivo y mil cosas que hacer. Si os gusta Assassin’s Creed lo vais a disfrutar. Yo lo terminé hace unos días y todavía sigo haciendo misiones secundarias. Si la saga no os convence en sus últimas entregas, bueno, que sepáis que es más de lo mismo.
Lo Mejor:
- Con bugs, algo de popping, bajadas de frames y 900p, pero aun así una salvajada visual imposible en hardware más antiguo: Iluminación, reflejos, texturas, distancia de dibujado, número de personajes en pantalla… una PS3 se derrite sólo con estar cerca de la pantalla.
- La recreación de París es increíble. El nivel de detalle es absurdo. El número de personajes que lo habitan, su variedad, la gran cantidad de edificios explorables… Lo mejor que he visto nunca.
- La ambientación “revolucionaria”
- La gran mejora en el combate
- El toque rolero
- Algunas misiones secundarias son muy originales (asesinatos, enigmas, distorsiones…)
- Las opciones para afrontar un asesinato
- El multijugador cooperativo integrado: Así sí.
- Arno es un tío majo
Lo Peor:
- Bugs molestos y falta de optimización (solucionado en parte con parches)
- ¿El presente?
- La historia podría aprovechar mejor el marco histórico.
- Algunas misiones poco novedosas y algo repetitivas.
- El parkour podía estar más depurado.
- Cierta sensación de que se está estirando el chicle… la historia ya no es trascendente como cuando estaba Desmond.
- No tener con quién jugar el cooperativo
- La actitud de Ubisoft para con este y otros juegos, como Watch Dogs… se están labrando una fama terrible cuando en el fondo es una de las pocas compañías que apuesta por nuevas IPs con cierta frecuencia.
Nota: 8.5
Lo curioso es que muchos de los problemas que menciono se arreglan mediante parches. Ya se han arreglado muchos de ellos.
Siempre nos quedará París.
PD: Ubisoft ha pedido disculpas públicas por, básicamente, lanzar el juego sin acabar. Ya ha lanzado un enorme parche que soluciona muchos de los errores, aunque no todos, y regalará a todos los compradores el DLC Reyes Muertos, que iba a ser de pago. También regalará un juego a los que compraron el pase de temporada, de una lista con muchos AAA recientes. Está bien, es bueno que reaccionen, trabajen en los errores y compensen a los usuarios. Pero estaría aún mejor que cambiaran su política de lanzamientos y le dieran a los juegos el tiempo que necesitan.
Ay Ubisoft… dale medio añito más de desarrollo a los juegos si lo necesitan, por favor. No necesitamos un AC cada año… y este año salen dos.
Por cierto, de Assassin’s Creed - Rogue también hablaré espero que pronto. Pero antes me espera Lara Croft en PSX.
PD: Casi todas las fotos y videos provienen de mi propia partida… el botón de share de PS4 es el mejor amigo del analista!!
Aunque lo de manejar las alas esas de Leonardo Da Vinci fue divertido 
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Otro Haytham ...
