Menos mal que no se sabe dónde vivo jeje. Cuando salió yo era un niño y mis padres no es que me compraran muchos videojuegos. Mis fuentes eran el alquiler (ningún videoclub de mi zona lo tenía) y mi primo. A mi primo le dejaron de comprar juegos más o menos por esa época, por desgracia. Pero gracias a mis tíos
pude probar montones de juegazos que de otra manera me habría perdido, como por ejemplo Sonic 3.
Tengo una copia de Sonic Jam, así que creo que le echaré un vistazo pronto, entre partidas al Shenmue 2 (nunca lo acabé y lo estoy remediando ahora, ayer acabé el primero y estoy al principio) y ratos de revisión de textos.